Basta echar un vistazo a la prensa especializada y no especializada en el sector primario para ver titulares muy pesimistas y con malas noticias respecto al mal momento por el que está pasando el mundo agrario, y muy especialmente el sector ganadero por la crisis de precios:
"La crisis obliga a ganaderos de ovino a dejar la producción y dedicarse a vacuno" (ABC.es, edición Córdoba)
"AVA denuncia que el 20% de las granjas de conejos han desaparecido en medio año" (agroterra.com)
"AVA denuncia que el 80% de las granjas de ovino-caprino están a punto de cerrar" (agrodigital.com)
"Ganaderos británicos disparan a sus cerdos por lo caro que resulta alimentarlos" (agrodigital.com)
"La crisis condena al cierre a 10.000 cebaderos españoles de vacuno en lo que va de año." (agroinformacion.com)
y esta situación no tiene visos de cambiar a corto plazo.
Muestras de buenas intenciones ha habido varias. En el caso de Castilla y León por parte de la Consejera de Agricultura (Silvia Clemente) y ya a un nivel nacional del Director General del Ministerio de Agricultura (Sr. Puxeu). Las medidas que han dejado entrever son insuficientes y meramente enfocadas a un problema coyuntural, y sin ambición e intención decidida de resolver un problema ya estructural.
Mientras tanto los ganaderos sólo pueden movilizarse y resistirse, o en el peor de los casos tirar la toalla. Está claro que a nuestro Gobierno le da lo mismo el futuro que le depare al sector primario....
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